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Arquetipos de personalidad para tu marca

Comenzó una nueva era. No hay un uno sin todos, ni un todos sin uno.

No hay una razón sin múltiples visiones ni maneras de ser. Ni puede haber una vida de retroalimentación social constante -y necesaria- sin una tolerancia y aceptación hacia una conciencia diferente, que mientras más distinta es, mejor. Creamos así, este gran enjambre de conciencias sociales.

En toda relación cultural podemos ver una construcción plenamente colectiva, donde los diferentes actores sociales no dan y reciben de manera lineal, sino que son ellos mismos los transversales en cualquier tipo de comunicación o intercambio. Las Redes Sociales y la Publicidad lo serán para el cliente como para la marca, así también el Marketing de los productos y servicios.

El psicólogo Carl Jung (1875 – 1961) plantea que estas construcciones colectivas que se heredan masiva y profundamente desde hace muchísimas generaciones, son arquetipos; los cuales, funcionan como patrones de conducta para detallar el camino de nuestra empresa y buscar la eficiencia en la concreción de nuestros objetivos.

El producto y el servicio trascienden el consumo y la demanda. Hoy en día las emociones, las experiencias, y el crecimiento personal en los distintos estilos de vida, cumplen una función protagonista para el vendedor y el cliente. Existe una necesidad de crear una conexión no solo sensorial sino también sentimental entre el cliente y nuestra marca.

Posicionarnos en un determinado arquetipo nos permite, como líderes, definir el destino de nuestros productos y servicios que se convierten en una figura clasificable en determinados estilos de vida.

Jung pensaba que no venimos al mundo en blanco, sino que el ser humano ya nace con información y ciertas creencias, y que no existe una sola idea o concepción esencial que no posea antecedentes históricos. Estos antecedentes históricos llegan a nosotros inconscientemente, y otros los vamos aprendiendo por medio de la experiencia.

Esto implica que no nos desarrollamos de manera aislada al resto de la sociedad, sino que el contexto cultural nos influye en lo más íntimo, transmitiéndonos esquemas de pensamiento y de experimentación de la realidad que son heredados.

Es fácil identificar diferentes tipos de patrones de conducta en los mitos y leyendas de las culturas antiguas, todas tienden a tener un mismo héroe y trama, que además tienden a repetirse. Esta continua repetición de historias con los mismos personajes y el mismo guion es lo que Jung llama Arquetipos.

Son 12 los arquetipos principales en los cuales podemos posicionarnos para desarrollar determinados atributos que permitan practicar la humanización de la marca, la definición de la identidad de empresa, además de comprender la relación de las mismas con sus clientes, y generar estrategias de marketing a partir de disparadores emocionales.

La veracidad y credibilidad que brindan los diferentes arquetipos demostrados en la esencia propia de la marca, también genera confianza en el público, además de tener un rol fundamental en el proceso de toma de decisiones de vender y comprar. La necesidad de invertir en valores y herramientas que enmarcan la identidad de marca es fundamental.

Se crean estilos de vida, se vislumbran los deseos y las pasiones. Las marcas logran vender experiencias más que productos y servicios, y se fortalece la conexión de quien da y quien recibe, gestándose una relación de mutua de crecimiento personal e innatamente colectivo.

Arquetipos

  • El Inocente

Es quien inspira pureza y simplicidad. La vida es espontánea y simple. Siempre busca ver lo positivo de las cuestiones, porque así es él, optimista, y porque así también es el mundo. Demuestra que la belleza existe y es simple. Sus mensajes transmiten felicidad, valores, juventud.

El inocente es capaz de encontrar soluciones en el caos, y los problemas son simplemente obstáculos sencillos de superar. Su identidad es transparente como también lo son sus decisiones.

Un claro ejemplo de este arquetipo es Dove. En su sitio web oficial, pronto notamos el siguiente concepto: “la belleza no está definida por las formas, el tamaño o el color, sino que se trata de sentirte como la mejor versión de ti misma. Auténtica. Única. Verdadera.

Otros ejemplos: Disney, Coca Cola, McDonalds.

  • El Sabio

Este arquetipo tiene como impronta darle valor al acto de pensar y, asimismo, insta a que el público piense. Su fuerte son las grandes ideas y una sabiduría justamente demostrada. Cree que compartir el conocimiento es una excelente manera de entender el mundo y llegar a grandes lugares. Además, buscan y comparten conocimiento de manera constante. TEDx, junto a sus discursos, son un claro ejemplo de esta conducta sabia, estimulan la toma de consciencia y el aprendizaje. Las marcas concernientes a este arquetipo inspiran sabiduría, inteligente, e innovación tecnológica. Otros ejemplos: Google, Phillips, HP.

  • El Héroe

Destinado a cambiar el mundo, trabajador, valiente, de semblante inspirador y siempre muy comprometido con lo que hace, este perfil es altamente productivo y está listo para enfrentar cualquier desafío que se presente en su camino. Demuestra victoria y es ejemplo del esfuerzo, insta a luchar por los sueños y estimula a tener una mente ganadora. Son inmunes a las respuestas negativas y a los obstáculos. Y, definitivamente, el héroe no teme al trabajo duro.

Un claro ejemplo es Nike, como una de las principales marcas que refuerzan este arquetipo. Esta marca retrata figuras superadoras y demuestra que todo esfuerzo tiene recompensa.

Otros ejemplos: Duracell.

  • El Forajido

Es rebelde e inquieto, romper los límites es su objetivo. Es revolucionario y transforma lo que toca. Este arquetipo permite a las marcas demostrarse innovadoras y originales ante sus contemporáneas. En esta conducta se destaca Apple, que permitió desde el siglo pasado y continúa permitiendo llevar todo más allá de lo obvio. No solo logró transformar los dispositivos electrónicos en sí, sino que también en sus redes sociales patentiza su esencia con contenidos que nada tienen que ver con dispositivos electrónicos en sí, sino un contenido salvaje y aventurero.

Otros ejemplos: Harley Davidson.

  • El Explorador

El mundo está expectante a ser descubierto por este arquetipo, que pretende además no llevar una vida aburrida ni convencional. La avidez es una de sus características principales, que valora la libertad y cree que se pueden lograr grandes sentimientos como la felicidad y la satisfacción en la vida a través de pequeños descansos en la rutina. De personalidad auténtica, atrevida y descarada, con el objetivo de experimentar nuevos retos y reinventarse. El explorador no se conforma, es valiente y ambicioso.

Una de las marcas que por excelencia representa el espíritu explorador es Land Rover.

Otros ejemplos: Jeep, RedBull.

  • El Mago

El mago logra transformar la realidad y el sentido común. Es carismático e inspirador. Transmite seguridad en sí mismo y estimula la confianza en el público. Además, genera inspiración, emoción y motiva a soñar.

Logra crear ideas innovadoras y disruptivas, que terminan siendo vistas como locas. Para ejemplificar, hay innumerables marcas que cumplen el papel del mago, pero una de las más interesantes es Red Bull. Sus redes sociales están compuestas casi en su totalidad por videos de personas que realizan actividades fuera de la caja.

Otros ejemplos: Absolut Vodka, Axe.

  • La Persona Corriente

Totalmente alejado de la ostentación, conectado a la impatía, este arquetipo de persona común tiene como objetivo integrarse perfectamente en la sociedad. No le importa ser uno entre muchos.

No hay fórmulas mágicas para el éxito o grandes promesas: la eficiencia se logra de manera práctica, factible, democrática y accesible. El deseo de pertenecer es grande, y muchas marcas están invirtiendo en estas características para aumentar los niveles de humanización y engagement. Se trata de marcas realistas y sencillas de entender que trabajan en el marketing de influencia.

La campaña de Ikea “Tu casa tiene algo que decirte” es un gran ejemplo de esto, con un lenguaje que es accesible y despierta sentimientos de que el espectador podría ser esa persona que vive esos desafíos que consigue superar gracias a la marca. El hombre común no tiene intenciones ocultas, expresa honestidad.

Otros ejemplos: Ebay,

  • El Amante

De esencia pasional y seductora, enfocado en transmitir entusiasmo, deseo, elegancia y sensibilidad. El punto principal de este arquetipo no implica necesariamente amor, sino personalización. La característica que involucra los productos o servicios es que son limitados, un número menor de personas tendrá acceso a ellos, lo que despierta la sensación de exclusividad.

En las redes sociales, este arquetipo demuestra sensualidad, audacia e intimidad, con piezas de publicidad capaces de hablar directamente con el cliente, como si estuvieran hechas para cada persona específica.

Ejemplos: Dior, L´Oréal, Martini.

  • El Bufón

Su esencia es divertida y despreocupada, enfocado en el humor, el optimismo y la creatividad. Aquí la idea es divertirse reformulando todo desde el punto de vista de la inocencia.

Las marcas que trabajan con este arquetipo tienen como visión el hecho de que vivir es simple, no tienen ideas extremadamente disruptivas. Su comunicación es divertida y espontánea. Oreo es un claro ejemplo.

Otros ejemplos: Fanta.

  • El Cuidador

Es proyector y paternal, se posiciona desde el afecto y el cuidado, con el objetivo de mejorar la vida del cliente sin escatimar en esfuerzos para hacerlo. Su objetivo es ayudar a los demás y nunca se estimula la idea de negar algo. Las personas se colocan como el foco, así como las necesidades de la sociedad en su conjunto. Busca generar sensibilidad.

Proyectan generosidad y altruismo, e inspiran seguridad y confianza. Es común ver a marcas de este tipo tomar una posición frente a problemas relevantes en el mundo, como guerras, enfermedades o problemas ambientales. El objeto central de este arquetipo es el ser humano y no la institución. Un ejemplo claro es Médicos Sin Fronteras.

Otros ejemplos: Nestle, Mapfre, Volvo.

  • El Creador

Creatividad, creatividad y creatividad. Su temor es ser mediocre. Ingenioso e innovador. Se trata de marcas que no buscan el conformismo ni la comodidad, con proyectos interesantes que pretenden materializar ideas que perduren en el tiempo. Consta también de rasgos artísticos y quieren dejar su huella en el mundo.

La marca que por excelencia representa los valores de un creador, que demuestra y publicita de manera práctica todas las posibilidades adquiridas por una persona al comprar el producto, es Lego.

Otros ejemplos: Apple.

  • El Gobernador

Finalmente, nuestro último arquetipo es el que se posiciona como un líder natural. Cómodo en medio de grandes multitudes, se expresa con facilidad y tiene un gran poder de persuasión.

Asimismo, las marcas de este arquetipo tienen delimitado un público de estatus económico y social alto, y otorgan así exclusividad, glamour y prestigio. Demuestran carisma y poder, como por ejemplo la marca Rolex.

Otro ejemplo: Mercedes Benz.

La eficiencia de los arquetipos va más allá del deseo de vender y generar rentabilidad, sino que se trata de generar una relación transparente entre la marca y el cliente, con productos y servicios de diferenciado valor agregado.